"Y además otra cosa". Así arrancaba Chilavert sus frases más furibunas.
Siento un terrible desprecio hacia blogger.com. Es lamentable que yo haya posteado algo el domingo 8 de octubre y aparezca publicado recién el miércoles 11. Esto que estoy poniendo ahora va a salir recién para el 14 y mi infinito público lector (IPL) termina siendo el más perjudicado.
Pido perdón, entonces, en nombre de Blogger, a mi mamá, a mi hermano y a mi novia y a los otros dos o tres gatos locos ocasionales que andan por ahí. El IPL propiamente dicho.
Se enteraran el 14, entonces, de que más allá de las aceptables gastadas a los bosteros, me tiene un poco indignado ver a los dirigentes de River subidos a la supuesta ola del éxito. Asesinos del buen fútbol. Hace no sé cuántos años que el club no tiene un equipo que haga una campaña respetable. Todos nos preguntamos porqué razón fue que lo echaron a Ramón Díaz (habrá sido por ser campeón de todo y por armar equipos y jugadores que la rompían).
Y todos nos acordamos, a pesar de este éxito, de que más que un club de fútbol somos una concesionaria de jugadores. Porcentajes de las dos figuras del Súper Clasico, Belluschi e Higuaín, ya fueron vendidos (dos casos burdos entre tantos otros; uno recién llegó al club y el otro acaba de debutar en primera) y se sabe que no les quedan demasiados semestres con la banda.
Además, todavía no da para agrandarse. En los últimos 7 años el mundo fue de Boca. Ganaron todo y jugaron mejor que todos. Con Bianchi y con Basile. Nadie se olvida de eso por un solo clásico; no vendan humo. A pesar de que les ganamos un partido, ellos siguen siendo los ganadores de la década.
Uy, perdón IPL.
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